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Una delegación del gobierno libio llegó a Beirut para mantener conversaciones con las autoridades libanesas sobre el caso de Hannibal Gaddafi, hijo del fallecido líder libio Muamar Gaddafi, según fuentes citadas por Al Arabiya y Al Hadath el lunes.

La delegación, enviada por el gobierno con sede en Trípoli, busca una solución al caso de Hannibal y al antiguo problema de la desaparición del imán Musa al-Sadr y sus dos acompañantes durante una visita a Libia en 1978, un hecho que aún permanece sin resolver. Se espera que las conversaciones también sienten las bases para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Libia y Líbano tras años de tensión.

Este acontecimiento se produce después de que el equipo legal de Hannibal Gaddafi reafirmara que su caso es puramente judicial y humanitario, sin ninguna dimensión política. El 17 de octubre, un tribunal libanés ordenó su liberación tras diez años de detención sin juicio, bajo fianza de 11 millones de dólares. Sin embargo, su defensa rechazó esta condición.

El abogado francés Laurent Bayon calificó la decisión de “inaceptable en un caso de detención arbitraria”, señalando que su cliente sigue sujeto a sanciones internacionales y no puede reunir dicha cantidad.

Hannibal Gaddafi, de 49 años, casado con una modelo libanesa, fue arrestado en diciembre de 2015 por las autoridades libanesas bajo cargos de “ocultar información” relacionada con la desaparición del imán Musa al-Sadr y sus dos ayudantes durante su visita a Libia en agosto de 1978, cuando Hannibal tenía solo dos años.

Desde su detención, no ha sido juzgado formalmente y permanece en régimen de aislamiento. La última iniciativa diplomática libia señala un renovado esfuerzo de Trípoli para lograr su liberación, al tiempo que aborda cuestiones más amplias que afectan a las relaciones libio-libanesas.

Fuente: Libya Review

Publicado por AiSUR

Premio Nacional de Periodismo Necesario Anibal Nazoa 2020