La nueva fuerza multinacional africana diseñada para liquidar a los grupos terroristas en el Sahel tendrá cinco mil efectivos y contará con el apoyo de Francia y de la ONU.
El contingente fue presentado en la recién concluida cumbre del G5-Sahel, a la que asistieron los líderes de los integrantes de los países integrantes de la agrupación, Mali, Mauritania, Burkina Faso, Níger y Chad, además del presidente galo, Emmanuel Macron, quien enfatizó la necesidad de un trabajo mancomunado de las partes.
Las tropas centrarán su acción en la frontera entre Níger y Malí, entre ese último país y Mauritania y en los bordes comunes entre Burkina Fasso, Níger y Mali y coordinará operaciones con la Minusma, la misión de la ONU para Mali y las tropas francesas acantonadas en este país.
Los organizadores de la fuerza de tarea deben trabajar con prisa, ya que esta debe entrar en operaciones en el otoño (boreal) próximo, según trascendidos de la reunión, que sesionó dos días en esta capital.
En mayor o menor medida los integrantes del bloque, con la excepción de Mauritania, sufren los efectos de las acciones de grupos terroristas, en particular Boko Haram, que se hace llamar Wilaya Gharb Afriquiya (Provincia de Africa Occidental, en árabe) desde que juró lealtad a Estados Islámico, y Al Shabab, con cuartel general en Somalia.