Marruecos celebra la fiesta del burro Festibaz
En esta fotografía del viernes 22 de septiembre de 2017, un granjero bereber monta su burro en el festival anual de Imilchil, en la montaña Atlas de Marruecos.
Trabajando duro durante todo el año, los burros del pueblo marroquí de Beni Ammar Zerhoun recibieron un día de mimos mientras los aldeanos los celebraban en un festival.
Conocido como Festibaz, el decimotercer festival del burro del pueblo contó con un concurso de belleza y una carrera. Se inscribieron siete burros en el desfile, durante el cual los dueños hicieron desfilar a los animales ante un comité. "Shah Rukh Khan", el burro elegido como ganador llegó listo para impresionar, con una banda de flores colocada sobre su cabeza. Además de la decoración y la estética, el concurso de belleza juzga el comportamiento de un burro hacia sus dueños y otras personas.
La recompensa por ganar el concurso fue una bolsa de cebada de 50 kilogramos (110 libras). "Lo cuido constantemente y no lo descuido porque me ayuda y me lleva a donde quiero (ir)", dijo Amine Yaala, cuyo burro ganó el concurso de belleza de burros. Los burros son un elemento habitual de la vida diaria en este pueblo, donde son imprescindibles para el transporte en su terreno montañoso y para el transporte de mercancías. "No puedo prescindir de ellos porque son extremadamente importantes y necesarios en las zonas montañosas. En terrenos llanos utilizamos tractores. Pero para movernos en las montañas, siempre los necesitamos", dice Mohammed Azzouzi, un aldeano. Sin embargo, la conocida terquedad de la especie ha convertido la palabra burro en sinónimo de ineptitud y falta de inteligencia.
Pero los aldeanos de Beni Ammar Zerhoun consideran que los burros son un activo indispensable en la economía local. El pueblo empezó a organizar un festival de burros en 2001, pero no lo ha celebrado todos los años. Este es el primer año que se reanuda el festival desde la pandemia de COVID-19. Al margen del festival, la Sociedad para la Protección de los Animales y la Naturaleza organizó una campaña para tratar a los burros. Fueron examinados para asegurarse de que gozaran de buena salud antes de participar en la carrera de burros. La competición se desarrolló a lo largo de 1 kilómetro, en la que participaron 12 burros y jinetes de entre 17 y 20 años.
El ganador fue Said Hayani, un aldeano de 19 años que dijo estar orgulloso de su victoria.