Egipto insistió en un acuerdo con Etiopía sobre la utilización de la Gran Presa del Renacimiento (GERD), pese a las tensiones que mantienen hoy ambos países por esa obra construida sobre el río Nilo.
Llegar a un entendimiento entre Egipto, Sudán y Etiopía allanaría el camino para la cooperación y la integración regional, afirmó el ministro de Recursos Hídricos, Mohamed Abdel Ati.
Durante una reunión con la Representante Especial de la Unión Europea para el Cuerno de África, Annette Weber, el funcionario advirtió contra la operación unilateral de la represa al estimar que interrumpiría el sistema de gestión del agua de las otras dos naciones.
También destacó la necesidad de una coordinación total en el llenado y operación de la GERD.
Tanto El Cairo como Jartum insisten en un acuerdo legalmente vinculante con Etiopía sobre el tema.
Hace unos días, esta nación norafricana criticó el anuncio de Addis Abeba sobre el inicio de generación de energía a partir de la obra.
Esa decisión viola la Declaración de Principios firmada por ambos países y Sudán hace siete años, estimó en un comunicado el Ministerio de Relaciones Exteriores egipcio.
Patrocinada por la Unión Africana, en abril del pasado año colapsó la última ronda de conversaciones para resolver la disputa de una década.
Egipto afirma que la obra amenaza su cuota de agua del Nilo, del que depende casi por completo el consumo humano, la agricultura y la industria del país, con más de 100 millones de habitantes.
Por su parte, las autoridades de Addis Abeba consideran la GERD clave para abastecer de energía eléctrica a los más de 110 millones de habitantes de Etiopía e impulsar así el desarrollo socio-económico del país africano.
Fuente: Prensa Latina
Publicado por AiSUR
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