Banderas de los BRICS. | Foto: Pixabay
Por Marlon Peña Labrador
En 2010 hubo quienes criticaron y crearon controversia acerca de la importancia en la incorporación de Sudáfrica al bloque de los BRICS, argumentando por desinformación que, comparativamente con los miembros fundadores, era una economía y población pequeña.
Más de una década después de su membresía quién puede negar el aporte del líder africano en el bloque de las economías emergentes del planeta, jugando un papel constructivo en el reequilibrio global del poder geopolítico, y siendo una voz potencial para el continente africano, sobre todo durante su organización de la XV Cumbre de los BRICS en Johanesburgo (Sudáfrica), que se desarrolló los días 22 al 24 de agosto de 2023, bajo el lema: «BRICS y África: Asociación para un crecimiento mutuamente acelerado, desarrollo sostenible y multilateralismo inclusivo», en la que participaron representantes de más de 60 naciones y se testimonió, a través de los medios, la Expansión a los BRICS PLUS.
La decisión más importante de esta Cumbre fue sin duda la invitación a seis países a unirse a la asociación, que admitió finalmente a cinco nuevos miembros. Tal como declaró Ciryl Ramaphosa - presidente de Sudáfrica: «Hemos decidido invitar a la República Argentina, la República Árabe de Egipto, la República Democrática Federal de Etiopía, la República Islámica de Irán, el Reino de Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos a convertirse en miembros plenos del BRICS. La membresía entrará en vigor a partir del primero de enero de 2024». Argentina quedó fuera después de la nefasta victoria del ultra derechista Milei, quien menospreció el Bloque privilegiando relaciones con sus verdugos occidentales, dejando a la región de América Latina sin un nuevo miembro, por ahora.
Esta es la segunda expansión de la asociación en su historia, después de la incorporación de Sudáfrica quien fue invitada a unirse en 2010, aumentando la preocupación en los países hegemónicos de occidente por el poder económico natural que representaba la organización de una comunidad de países con economías denominadas emergentes.
Un año después de la Cumbre de Johannesburgo, el Bloque BRICS PLUS se presenta con nuevos miembros plenos, que al igual que en 2010, algunos desde el G7 intentaron minimizar la capacidad y potencial que representan las nuevas naciones incorporadas, como el caso de la República Federativa de Etiopía que conjuga un crecimiento económico y demográfico al este del continente africano y detenta una de las mayores reservas de agua. Egipto, por su parte, es un aliado estratégico en la región de El Sahel, controla el Canal de Suez, cuya infraestructura es clave para el comercio global.
La actual configuración de los BRICS aumentó aún más su peso a nivel internacional. Según datos obtenidos la suma de sus economías representa un tercio la del planeta; y, en el aspecto demográfico, supone casi la mitad de la población mundial. Además, la ampliación supuso para la organización una mayor presencia geoestratégica al incorporar países de nuevas áreas, como Arábia Saudita, Emiratos Árabes Unidos e Irán de la península arábiga.
Menos de una década será necesaria para evidenciar los alcances de esta expansión y productiva asociación en la que Venezuela, junto a dos decenas de países, apuestan por más que una alianza estratégica y piden ser miembros plenos del bloque.
De lograr esta hazaña geopolítica, Venezuela sumará sus grandes reservas de petróleo, su infraestructura energética y su potencial mercado, cuya ubicación privilegiada contribuiría dentro del cumplimiento de los objetivos más reseñables del Bloque: la cooperación económica y el incremento del comercio entre sus miembros.
El tiempo le dará la razón al Presidente Nicolás Maduro, a sus esfuerzos continuados desde el gobierno del Cmdte Chávez, quien apuntaló el camino para que nuestro país forme parte de la organización.
Como lo aseveraría a su llegada a la ciudad de Kazan, en Rusia, para participar en esta edición XVI:
“Estamos en la XVI Cumbre de los BRICS para compartir de la experiencia, la lucha histórica de Venezuela, los sueños y esperanzas de un mundo sin colonialismos, ni hegemonismos, o imperialismos, sino de un mundo donde las superpotencias emergentes puedan compartir con los países que aspiramos desde el sur global, a la independencia, al desarrollo y a la prosperidad.”
“Los BRICS son el epicentro de un nuevo mundo multipolar, de la nueva geopolítica, de la diplomacia de la Paz y sobre todo son la esperanza para los países del Sur, que aspiramos al desarrollo y que llevamos la bandera de la igualdad y la libertad.”
A su llegada, el Pdte Maduro enfatizó igualmente que:
“Estamos preparados para formar parte del nuevo mundo de los BRICS, contribuyendo desde la Venezuela Bolivariana en la construcción del mundo multicéntrico y pluripolar que está naciendo, teniendo la posibilidad de acceder a una economía que no se maneje mediante el uso de las sanciones, el chantaje y la hegemonía, sino que su fundamento sea la cooperación y un comercio verdaderamente libre.”
Afirmando que la participación de Venezuela en este importante encuentro es un avance muy significativo en la nueva geopolítica mundial.
No me queda ninguna duda, de la importancia que reviste el esfuerzo diplomático y político realizado por nuestro gobierno Bolivariano de incorporarnos como nación a la organización más robusta del planeta en términos de oportunidades y condiciones de cooperación sostenible, amigable y mutuamente ventajosa, además de una gobernanza global más justa y equitativa.
Publicado por AiSUR
Premio Nacional de Periodismo Necesario Anibal Nazoa 2020