ÁFRICAEn 1960, 17 países africanos se independizaron de Europa
Por Gustavo Abreu*
Este 2020, se cumple el 60 aniversario de la independencia de 17 países africanos.
Dentro de las independencias africanas logradas en 1960, podemos resaltar que 14 de los 17 estados obtuvieron la independencia de Francia, ellos Camerún, Togo, Madagascar, Benín, Burkina Faso, Chad, Congo, Costa de Marfil, Gabón, Níger, República Centroafricana, Senegal, Mali y Mauritania.
Durante este turbulento año 2020, entre la pandemia por el COVID19, problemas geopolíticos, ataques a las naciones progresistas, y las nuevas luchas de los pueblos en contra del racismo, se cumplen 60 años de un momento único en la historia universal, en específico en la historia africana. En el año 1960, África vivió el nacimiento de 17 Estados soberanos, en donde también ingresaron a la Organización de Naciones Unidas. Los procesos de independencia ocurridos en el África tuvieron como catalizador los cambios mundiales , específicamente en una nueva etapa de la historia que estaría marcada por la presión de las nuevas superpotencias contra el colonialismo, sumado a los antecedentes de independencia de otras excolonias (sobre todo en Asia), por el incremento de los ideales de autodeterminación, y lo más importante, por la lucha y los logros realizados por los pueblos africanos, en la búsqueda de realzar sus nacionalismos y de lograr la victoria contra el yugo colonial, obteniendo el fruto más deseado por los pueblos africanos: la libertad.
Durante 1960, se sintió el optimismo en el ambiente mundial. Para aquel año, el afroamericano Ralph Bunche, quien tenía el cargo de subsecretario de Asuntos Políticos de las Naciones Unidas, comentó en febrero de 1.960: “Este será el año de África”, teniendo la primera independencia el 1ero de enero de dicho año, con la creación de la Republica de Camerún, la cual formaba parte de las colonias francesas. Ralph Bunche había presagiado la creación de otros 7 nuevos países antes de final de año. Sin embargo, dicho presagio quedo muy corto, dado que luego de la independencia de Camerún, vinieron las de otros 16 estados. Distintos políticos de la época, como Harold MacMillan, Primer Ministro Británico, expresaron una realidad palpable en el ambiente de aquel entonces, anunciando en su discurso en el Parlamento sudafricano, en febrero de 1960: “Vientos de cambio”. Definiendo el momento histórico como una “marea independentista imparable”.
Entre los antecedentes históricos que propiciaron las independencias de los estados africanos, se pueden nombrar el protagonismo de tuvieron las superpotencias ganadoras de la segunda guerra mundial, como los fueron Estados Unidos y la Union Soviética, cuyos objetivos no contemplaban que Europa siguiera teniendo sus colonias en África.
Otro hecho que impulso las independencias africanas fue la realización del 5º Congreso Panafricano de Mánchester, en octubre de 1945. Nkwame Nkrumah de Ghana, Jomo Kenyatta de Kenia y Hastings Basanda de Malaui, y otras personalidades, algunos serían futuros presidentes africanos. En dicha conferencia, se estableció el manifiesto de la reunión denominado “Desafío a las potencias coloniales”, que expresaba de los pueblos africanos las siguientes ideas:
“Estamos determinados a ser libres. Queremos educación. Queremos el derecho a tener una vida digna, a expresar nuestros pensamientos y emociones, a adoptar y crear formas de belleza”.
En la expansión del panafricanismo como nueva ideología para la liberación de los pueblos africanos fue determinante el trabajo de Nkwame Nkrumah, quien se erigió como líder del movimiento con la visión de que una “Unión de Estados Africanos” política y económica acabaría con el colonialismo europeo en el continente.
Otro de los antecedentes históricos fueron las protestas anticoloniales por todo el antiguo Imperio francés, sucediendo esto después de la segunda guerra mundial. Las primeras en Argelia en 1945 y en Madagascar dos años más tarde. El costo humano, económico, junto a la grave reputación que generaron estos hechos, hizo que el General Charles De Gaulle replanteara el proceso de descolonización del resto de colonias francesas en África. En 1958, el líder francés promulgó un nuevo modelo por el que los territorios africanos podrían “administrarse libremente”. Para ello debían aceptar la nueva Constitución francesa y decidir si preferían mantener su estatus, asimilarse dentro del sistema francés como territorios metropolitanos o tener autonomía política en un modelo federal bajo el control de París. La mayoría de los territorios aceptaron la carta magna y la autonomía de gobierno. Pero en septiembre de ese mismo año, Guinea (Conakry) había votado por no continuar sujeta a la Comunidad Francesa, en un acto desafiante con la supremacía europea, que a su vez era cuestionada a nivel internacional luego de finalizar la II Guerra Mundial. Guinea fue el único territorio que rechazó todo el sistema, cortando la relación con Francia y convirtiéndose en la primera colonia francesa en alcanzar la independencia en 1958. De esta forma, Guinea demostró al resto de colonias francesas que la independencia era posible, señalando el camino para la ola de descolonización dos años después. Entrando al 1960, De Gaulle no tuvo otro remedio que aceptar el establecimiento de “nuevas relaciones basadas en la amistad y cooperación”, en comparación a “supuestamente” mantener un sistema colonial “costoso e improductivo”.
El imperio francés, fue el más afectado con la liberación de sus excolonias. En el contexto histórico del momento, Europa venia de sufrir la segunda guerra mundial, e incluso, muchos de sus soldados pertenecían a las fuerzas armadas de los imperios europeos, como por ejemplo los famosos francotiradores senegaleses de la legión extranjera francesa . Los soldados africanos en el ejército imperial británico en Birmania, tuvieron contacto con soldados coloniales de la India, Indonesia, Indochina, Medioriente (Asia Occidental), y en estas interacciones, lograron conocer la chispa revolucionaria de muchos compañeros de armas, que ya deseaban alcanzar a toda costa el sueño de independencia de los imperios europeos. Esto fue uno de los grandes catalizadores que acelerarían las independencias del continente.
Dentro de las independencias africanas logradas en 1960, podemos resaltar que 14 de los 17 estados obtuvieron la independencia de Francia, ebtre ellos Camerún, Togo, Madagascar, Benín, Burkina Faso, Chad, Congo, Costa de Marfil, Gabón, Níger, República Centroafricana, Senegal, Mali y Mauritania.
El 1 de enero 1960 empezó con la independencia de Camerún, un país que había sido colonizado por tres potencias distintas: primero por Alemania y, tras la I Guerra Mundial, por Francia y Reino Unido. La independencia del Camerún francés dio la señal de inicio a las independencias de otros territorios dominados por Francia, varios acontecimientos previos hacían inevitable la descolonización de los territorios franceses. En Camerún, por ejemplo, los franceses aplastaron la resistencia de un grupo revolucionario y acordaron la emancipación con los partidarios de otras facciones, para evitar romper la relación con Francia, asegurándose una buena relación futura con su antigua colonia.
Tras Camerún, el 1 de enero de 1960, se produjo un efecto dominó. Togo se independizó en abril y en junio se sumaron Madagascar y la Federación de Malí, que en septiembre del mismo año se disolvería en dos países: Senegal y Malí. En el mes de agosto de 1960, 8 excolonias europeas lograron la independencia, con la particularidad que todos eran colonias de Francia en los territorios del África Occidental y África Central: Dahomey (el actual Benín), Níger, Alto Volta (el actual Burkina Faso) y Costa de Marfil por una parte, y Chad, República Centroafricana, República del Congo y Gabón por otra.
Mauritania proclamó su soberanía en noviembre, meses más tarde que el resto de colonias francesas, debido a la indecisión sobre qué hacer con un territorio abandonado por París. Mauritania carecía de administración o infraestructuras y se gobernaba desde Senegal. Se plantearon tres opciones para su independencia: la integración con Marruecos, un proyecto de unión saharaui, y una federación junto con Senegal y Malí. Ninguna convencía a los mauritanos, que proclamaron la independencia a pesar del rechazo de Marruecos y la Liga Árabe.
Otros estados africanos que alcanzaron su independencia fueron Somalia y Nigeria, los cuales “pertenecieron” al Reino Unido. Somalia declaró su independencia el primero de Julio, y su jurisdicción estaba dividida entre Italia y Gran Bretaña, teniendo alta importancia por ser muy rica en minerales. Nigeria declaro su independencia el primero de Octubre, esta nación fue la joya africana de la corona británica y el territorio más poblado del continente. También la independencia de Nigeria, fue producto de la negociación, sin generar grandes complicaciones en comparación a su gran tamaño geográfico y su gran población. En 1954 se creó la Federación de Nigeria, confiriendo mayor grado de autonomía a las regiones, en un intento por balancear el delicado equilibrio étnico. La llegada de la independencia parecía augurar años de prosperidad, ya que se veía a la clase dirigente preparada y comprometida, sobre todo por Nmandi Azikiwe, líder del principal partido político nacionalista y primer presidente de la Federación.
Por otra parte, se declaró la independencia de la República Democrática del Congo – Kinshasa, el 30 de junio cuya libertad fue muy ansiada por sus pueblos, debido a la espantosa y sangrienta historia que vivieron los pueblos de este territorio, ya que fue uno de los peores episodios de la historia de los genocidios de la humanidad, bajo el mando del Rey Leopoldo II de Bélgica. El ex Congo Belga contrasta con los casos anteriores. La emancipación, en el contexto belga, fue apresurada y sin mucha coordinación, lo que frustró en forma veloz el optimismo presente en la ceremonia de transferencia de poder a la que acudió el monarca belga Balduino, y en la que el dirigente congoleño Patrice Lumumba sentenció: “La independencia del Congo es un paso decisivo hacia la liberación del continente africano entero”. El país se derivó en una lucha interna entre los cuadros nacionalistas y de una secesión en una rica provincia minera, Katanga, promovida por la antigua metrópoli, entre otros actores. El clima de inestabilidad hizo posible fraguar el magnicidio de Lumumba en enero de 1961, a manos de las fuerzas conservadoras y neocoloniales. Así la causa independista africana tuvo a su primer gran mártir.
Otro dato importante para el África al cierre del año 1960, fue que la Asamblea General de las Naciones Unidas realizo la proclamación de la Resolución N° 1.514 (XV), sobre la concesión de independencia a los países y pueblos coloniales, cuyo texto de la norma explicaba lo siguiente: “La falta de preparación en el orden político, económico, social o educativo no deberá servir nunca de pretexto para retrasar la independencia”. Esto hecho, junto las 17 independencias africanas ocurridas en ese año, serían la gran columna para que el resto de las naciones africanas lucharan y lograran su independencia en las décadas siguientes.
Finalmente, en este año 2020 se cumplen 60 años de un momento único en la historia africana. En aquella fecha por primera vez, una veintena de países africanos se incorporaron a la Organización de Naciones Unidas. Las independencias fueron impulsadas por los cambios generados por los pueblos, por la expansión de la doctrina libertaria del panafricanismo, los avances del principio de autodeterminación, unido a factores externos, como la presión de las nuevas superpotencias de la época contra el colonialismo, debilitamiento de los imperios europeos después de la segunda guerra mundial, antecedentes de independencia en Asia, entre otros factores.
Como dato curioso, se puede añadir que la población africana independiente pasó de 95 millones a 180 millones de personas en 1960, siendo más de la mitad de la población global del continente en ese momento. África dejó de ser un continente defenestrado y los africanos de ser considerados ciudadanos menores, y este continente pasó a liderar la descolonización a nivel internacional. Hoy en día, las naciones africanas hacen gran peso en la comunidad internacional, sigue siendo el bloque regional con más Estados miembros de la ONU, representado un 28% del total de las naciones del mundo.
Autor: Ingeniero. Gustavo Abreu. Egresado de los Diplomados del Centro de Saberes Africanos, Americanos y Caribeños. Investigadp de esta institución.
Publicado por AiSUR